Muchos padres llegan a la escuela infantil indignados, sorprendidos o enfadados por un comportamiento concreto que haya tenido su hijo/a. Nosotras como educadoras debemos hacerles saber para que sean conscientes que el aprendizaje del comportamiento se realiza por una de las siguientes vías:
*Por imitación de otras personas: Principalmente se imitan conductas de aquellas personas con características similares a las nuestras.
*Por las consecuencias que obtenemos: Siempre se tiende a repetir las conductas por las que somos felicitados y reconocidos por las personas importantes para nosotros. Por el contrario, las conductas rechazadas, discriminadas o ignoradas por estas personas tendemos a no repetirlas.
*Por los mensajes que se reciben: Es lo que se conoce como el efecto pigmalión. Acostumbramos a actuar según lo que esperen de nosotros las personas que consideramos importantes.
Si nos viéramos en esta situación , en la que los padres no son los mejores modelos a seguir . En la escuela le tendremos que mostrar otra alternativa para solucionar los problemas , ya que la convivencia en la escuela condiciona la conducta del niño ✌🏻️.
ResponderEliminarBueno Esther, es muy difícil el trabajo en ese sentido sin la colaboración de la familia... Por otro lado, ¿somos nosotros el modelo correcto?, je, je...
ResponderEliminarBuena entrada, pero no podemos trabajar con los menores sin trabajar con las familias, en EI no es cuestión de conceptos, es cuestión de hábitos, rutinas, autonomía, etc., y eso sin la familia complicado.